Este domingo, Lando Norris logró lo que muchos consideraban improbable: se coronó campeón mundial de la Fórmula 1 por primera vez en su carrera. Con su tercer lugar en el Gran Premio de Abu Dabi puso fin al dominio de Max Verstappen, y selló una temporada histórica para él y para su escudería, McLaren.
A lo largo de la campaña 2025, Norris demostró constancia, velocidad y madurez: ganó varias carreras —incluyendo triunfos claves en circuitos exigentes— y sumó puntos vitales cuando la presión estaba al límite. En Abu Dabi, a pesar de que Verstappen dominó la carrera, Norris mantuvo la compostura, hizo una conducción inteligente y obtuvo lo que necesitaba: el título por apenas dos puntos de ventaja.

La victoria de Norris no solo representa su éxito personal, sino también el renacimiento de McLaren en la élite de la F1. Es la primera vez desde 2008 que un piloto de McLaren levanta el trofeo de campeón mundial —un hito que marca el regreso triunfal del equipo británico.
Ahora, Lando Norris entra en la historia como el 11.º piloto británico en conseguir un título mundial, con una combinación de garra, talento y determinación que lo llevó a superar a rivales de gran calibre. Su triunfo representa también la certeza de que, en la Fórmula 1, la constancia y el trabajo en equipo rinden frutos incluso en temporadas reñidas.




























