Así lo estipuló el presidente Andrés Manuel López Obrador, junto con la colaboración de la secretaría de Marina-Armada de México (Semar), quienes serán los responsables de cuidar este patrimonio cultural.

También va a apoyar el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en la restauración de este edificio. Como dato extra, por órdenes del presidente Adolfo López Mateos, este fuerte se convirtió en monumento histórico en 1962, y desde entonces la INAH se ha encargado de protegerlo.

Andrés Manuel declaró: “Vamos a restaurar todo el fuerte, todo el castillo, cárcel que lo fue en su momento, de San Juan de Ulúa, hago ese compromiso y lo va a hacer la Secretaría de Marina. Vamos a hablar con el INAH para que ellos ayuden con toda la reconstrucción, pero la Marina se va a hacer cargo para reconstruir el fuerte por toda la historia. Es algo bello que está en el abandono”.