El Tribunal Preeminente de Los Ángeles (EE.UU.) ha sentenciado este jueves a cadena perpetua sin modalidades de salir bajo independencia condicional al multimillonario Robert Durst, de 78 años, por el homicidio de su mejor amiga Susan Berman en 2000.
El dictamen llega luego de que el pasado 17 de septiembre un jurado localizó responsable a Durst sobre los cargos imputados. El jurista del criminal, Dick DeGuerin, ha anunciado que planean formular una apelación al veredicto.
La parte acusadora sostuvo que el multimillonario tomó la decisión de matar a Berman, debido a que ella le había ayudado a componer una coartada falsa en 1982 relacionadas con la desaparición de su mujer Kathleen y por consiguiente, temía que su amiga pudiera revelar lo ocurrido a la Policía.
Por su lado, Durst llevaba un largo tiempo negando el producido de que estuviera en Los Ángeles en el instante del homicidio de Berman, al igual que testificó a lo largo de el proceso que, al llegar a la vivienda de la dama, la localizó muerta en el suelo de su propio dormitorio.
La situación de su mujer aún permanece sin resolución. El multimillonario jamás confrontó cargos involucrados con la desaparición de Kathleen. No obstante, un fiscal neoyorquino está dispuesto a formular acusaciones contra Durst por el deceso de su cónyuge, estricta AP, citando a una fuente familiarizada con el tema que habló bajo condiciones del anonimato.
“Lleva un largo tiempo dando vueltas. Tuvo mucha más vida, ya saben, Kathie [la señora desaparecida de Durst] no alcanzó los 30 años. Al fin y al cabo, teniendo presente lo cual ha realizado, tuvo mucha más vida de la que le correspondía”, afirmó a los periodistas el fiscal adjunto John Lewin tras anunciarse la condena.
Circunstancias del homicidio de Berman y otros crímenes
Según los reportes, Berman, amiga del delincuente a partir de sus tiempos estudiantiles en la Universidad de California, poseía inconvenientes financieros y Durst le concedió 50.000 dólares. La parte acusadora señaló que la dama quería recibir inclusive más dinero, por lo cual intimidó al criminal que iba a dialogar con la Policía sobre la desaparición de su mujer. No obstante, su cuerpo humano ha sido hallado el 24 de diciembre de 2000 con un balazo en la nuca, lo cual implica que conocía al asesino y por esa razón este tomó la decisión de dispararle por la espalda.
Para esconderse de los organismos de estabilidad, Durst se mudó a Galveston (Texas) y se alojó en una pensión bajo la aspecto de una dama muda y con el nombre de Dorothy Ciner. Ahí conoció a su nuevo vecino, Morris Black, a quien asesinó y desmembró en septiembre de 2001.
El multimillonario disfrazado ha sido detenido ciertos días luego, el 9 de octubre. Desapareció en cuanto lo liberaron tras costear una fianza, sin embargo ha sido arrestado por segunda vez el 30 de noviembre, al intentar de hurtar un sándwich en un centro comercial: una acción poco razonable para un hombre que poseía 37.000 dólares en su carro.
La protección consiguió rechazar las acusaciones de homicidio, hasta convencer al jurado de que Black amenazaba a Durst con una pistola y este respondió en legítima custodia. Por desaparecer luego de salir bajo fianza y por falsear las pruebas al desmembrar y ocultar el cuerpo humano, recibió una condena de 5 años en prisión y ha sido puesto en independencia en 2006.
“¿Qué hice? Puesto que matarlos a todos, desde luego”
La misteriosa desaparición de Kathleen Durst y el deceso de Susan Berman suscitaron interés mediático sobre el individuo de Robert Durst a lo largo de un largo tiempo. Basta rememorar que en 2002 y 2003 se habían escrito 2 exitosos libros sobre el tema.
No obstante, ha sido en 2010 que se logró realmente exitoso, una vez que Andrew Jarecki, director de cine de Estados Unidos, estrenó la cinta ‘All good things’ (conocida como ‘Cada una de las cosas buenas’ o ‘Crimen en familia’ en las naciones hispanohablantes), cuyo guión estaba basado libremente en lo cual se sabía, o más bien, se suponía de sus crímenes.
Le gustó a Durst. Y entonces contactó a Jarecki, lo cual terminó en la filmación de 2 largas entrevistas que brindaron pie a 6 episodios de la serie documental ‘La maldición’.
Pese a que Robert evitaba confirmar explícitamente su implicación en ambos casos, el cineasta asegura que en el curso del diálogo alcanzó estar seguro de que ha sido Durst quien asesinó a Kathleen y Susan.
Empero lo más revelador ha sido la sentencia inesperada de Robert una vez que salía de la sala, sin rememorar el micrófono que seguía grabando. “¿Qué hice? Puesto que matarlos a todos, desde luego”, murmuró.
Además, los creadores del documental encontraron una prueba que vinculó al causante con una nota anónima enviada a la Policía que condujo al cuerpo humano sin vida de Berman. Convencido de que no lo relacionarían con el mensaje, Durst aseguró a los cineastas que “solo el asesino podría haber escrito” el mensaje. Una vez que le mostraron 2 textos, una carta suya enviada a la víctima un año anteriormente del homicidio y la nota en cuestión, terminó que la escritura era igual en los dos, e inclusive tenían el mismo error: Beverley (la ortografía adecuada es Beverly) Hills.
El multimillonario ha sido arrestado otra vez el 14 de marzo de 2015, un día previo a la trasmisión del último episodio de la serie, donde se muestran sus palabras.