Tere Jaramillo/Grupo Marmor
Morelia, Michoacán.- En el segundo día de la aplicación de vacuna de refuerzo para edades de 60 y más la afluencia de personas es mucho mayor en las tres sedes.
El calor, la larga fila y tener paciencia son los elementos presentes en este segundo día.
La fila que empezó desde las 6:00 mañana, aunque algunos desde antes, fue haciéndose más larga con el paso de las horas. Algunos familiares de los vacunados se han dispuesto para formarse y ya en el momento de la vacuna pase de inmediato la persona a ser inoculada.
Policía de Morelia está expectante y alerta de lo que se ofrezca mientras que en las inmediaciones de los tres módulos dispuestos en la capital michoacana (explanada estadio Morelos, Polifórum y Venustiano Carranza) el tráfico es visible.
Los comerciantes no han perdido la oportunidad en ofrecer sus productos: sombrillas, papitas, lapiceros, bancos, aguas y más cosas, lo que “el cliente necesite, seño” gritan por ahí.
Entre señores y señoras se hacen plática para hacer la espera más ligera. Hablan de los nietos, de lo que se ha dicho de la nueva variante Ómicron, de qué prepararán esta Navidad. En fin, temas sobran y tiempo más.
Adentro de la sede, las personas esperan sentados, expectantes a recibir el tercer piquete. Mientras tanto el “ejército de la salud” está activo, ni un segundo se detienen. Algunos llenan documentación, otros dan indicaciones, unos más preguntan a las personas cómo se sienten. La música, una constante en las jornadas de vacunación, acompaña el proceso.
¡Ay, ahora sí dolió! dice un señor, una vez que reciben la vacuna esperan un momento para ver que todo esté bien. Es hora, dan el visto bueno para que salgan. Con una sonrisa en el rostro y gesto de alivio, salen contentos y felices. Misión cumplida, ya estamos como Matrix, reforzados.
