Anteriormente, Virgin Galactic había realizado vuelos al espacio en cinco ocasiones, pero solo con empleados de la empresa a bordo. Sin embargo, en su último hito, la Fuerza Aérea Italiana se convirtió en cliente de la empresa para su misión Galactic 01. El vuelo inaugural del servicio comercial se llevó a cabo desde la base Spaceport America en Nuevo México, un entorno desértico ideal para el lanzamiento.
El primer vuelo espacial comercial comenzó con el despegue de un avión de gran tamaño llamado VMS Eve desde la pista de Nuevo México. Este avión transportaba la nave VSS Unity, que estaba destinada a llevar a la tripulación al espacio. Una vez que el avión alcanzó una altitud de aproximadamente 15 kilómetros, liberó la nave espacial VSS Unity.
Tras la liberación, la VSS Unity encendió su motor y aceleró verticalmente con el objetivo de alcanzar una altitud superior a los 80 kilómetros, que es considerada el límite del espacio según los estándares del ejército estadounidense. Durante esta fase ascendente, los pasajeros experimentaron una aceleración significativa y fueron testigos de la transición entre la atmósfera terrestre y el espacio exterior.
Una vez que la VSS Unity alcanzó su punto más alto, los pasajeros pudieron disfrutar de un breve período de ingravidez y apreciar la impresionante vista del espacio desde las ventanas de la nave. Luego, la nave espacial comenzó su descenso de regreso a la Tierra, utilizando una técnica de planeo para aterrizar suavemente en la pista de Spaceport America.
Este emocionante logro marcó el comienzo de los vuelos espaciales comerciales de Virgin Galactic, permitiendo a personas fuera de la empresa tener la oportunidad de experimentar la ingravidez y contemplar la belleza del espacio. Con la Fuerza Aérea Italiana como cliente, Virgin Galactic ha dado un paso importante hacia la realización de su visión de hacer del turismo espacial una realidad accesible.
