La semana pasada, agricultores franceses expresaron su creciente frustración hacia la política agrícola gubernamental mediante manifestaciones inusuales que se volvieron virales en las redes sociales. En Cahors, arrojaron toneladas de estiércol y desechos frente a edificios estatales, generando al menos 300 metros cúbicos de residuos.
Las demandas de los agricultores se centran en mejorar sus condiciones laborales e ingresos, afectados por el aumento de costos de producción, diferencias regulatorias con otros países europeos, trámites administrativos, impuestos y daños causados por la fauna.
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— Grupo Marmor Multimedios (@Grupo_Marmor) December 7, 2023
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Tras una reunión insatisfactoria con el gobierno, los agricultores intensificaron la protesta bloqueando el acceso a la ciudad, esparciendo estiércol en rotondas y generando congestiones de tráfico. Han anunciado que la movilización continuará hasta que el gobierno aborde sus demandas y asegure un futuro digno para el sector.