Año Nuevo: Orígen de esta celebración

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Monserrat Hernández/Grupo Marmor

Sin duda la celebración de Año Nuevo es un momento en el que muchas personas celebran con alegría, organizando fiestas, reuniones con familiares y amigos, entre muchas otras actividades divertidas, y todo ello, para festejar el comienzo de un nuevo año prometedor en el que todos se proponen nuevas metas a alcanzar en el año venidero.

Aunque muchas personas alrededor del mundo celebran el Año Nuevo el 1 de enero, pocos saben que en sus inicios esta celebración se realizaba en el mes de marzo pero gracias al emperador Julio César, el primer día del año pasó a ser el 1 de enero.

La razón fundamental de esta decisión es que en la antigua Roma, era en el undécimo mes (enero), cuando los cónsules asumían el nuevo gobierno. Por esta razón enero era el mes dedicado al dios Jano, el patriarca de las entradas y los nuevos comienzos.

Para los romanos este día significaba reescribir nuestro destino, hoy en día la llegada del Año Nuevo sigue teniendo el mismo significado. De acuerdo a la cultura, costumbres y tradiciones, en cada país, la celebración del año nuevo tiene varios matices, pero siempre con el mismo fin: iniciar un nuevo año con los mejores deseos así como propósitos por cumplir.

En el caso de México la llegada de un nuevo año siempre causa expectativa y alegría en las familias. Su celebración es en general muy similar a la de Noche Buena, sólo que a las 00:00 hr. Se hace un brindis chocando las copas de cada uno de los comensales y se comen 12 uvas lo más rápido posible pidiendo un deseo, conforme se dan las campanadas que anuncian el inicio de un nuevo año; las uvas representan cada uno de los meses del año que se inicia.