Un individuo en Taiwán llevó a cabo una maniobra desesperada para obtener un seguro millonario, valuado en más de 20 millones de pesos, al amputarse deliberadamente las piernas.
Según las autoridades, el hombre, identificado como Zhang, enfrenta cargos por fraude debido a su intento de obtener una indemnización por problemas de salud de manera fraudulenta.
Para llevar a cabo su plan, Zhang colaboró con su amigo Liao en lo que creían sería un “plan perfecto”.
Durante un período de 10 horas, Zhang sumergió sus piernas en un cubo lleno de hielo seco, una forma de dióxido de carbono sólido que alcanza temperaturas de -78.5 grados centígrados. A diferencia del hielo común, el hielo seco experimenta sublimación, pasando directamente de sólido a gas. Esta característica lo hace ideal para mantener alimentos congelados durante el transporte.
Una vez que las extremidades estuvieron expuestas al hielo seco, Zhang y su amigo Liao simularon un accidente en motocicleta en una carretera. Cuando Zhang fue llevado al hospital, los médicos se vieron obligados a amputar ambas piernas debido a las graves lesiones por congelamiento.
Zhang afirmó ante los médicos que el accidente fue la causa de sus lesiones, justificando así su necesidad de cobrar el seguro. Sin embargo, los especialistas pronto desconfiaron de su historia cuando las lesiones no coincidieron con un accidente de moto.
Las investigaciones revelaron el cubo de plástico utilizado para el proceso de congelación, así como documentos relacionados con el reclamo del seguro y dispositivos electrónicos. Además, las autoridades descubrieron que Liao había obligado a Zhang, quien perdió sus piernas, a firmar un pagaré por una suma considerable de dinero.
El caso puso de manifiesto la trama fraudulenta elaborada por Zhang y Liao, quienes ahora enfrentan las consecuencias legales de sus acciones.
