Conmemorando la historia del ‘vocho’ en México

Banner

Monserrat Hernández/Grupo Marmor

El Volkswagen Escarabajo fue la piedra angular del crecimiento y expansión de la marca en el mundo. En 1949 exportó sus primeras unidades a Estados Unidos y desde allí, su gran éxito internacional le permitió consolidarse y desarrollar nuevos modelos.

En el caso de México, la historia de Volkswagen empezó el 7 de mayo de 1962, cuando se fundó una planta propia de ensamble. Años después, el 15 de enero de 1964 se crea formalmente la empresa Volkswagen de México, con instalaciones ubicadas en Xalostoc, Estado de México. Sin embargo, la demanda del auto provocó que la fábrica de producción se mudara a Puebla.

El auto rápidamente conquistó a México por ser ‘rendidor’, económico, aguantador y con características nunca igualadas. Para muchos países de América Latina y claro para nuestro país, el ‘Vocho’ fue mucho más que un simple auto. Para miles de familias fue su primer medio de transporte, el auto en el que aprendieron a manejar generaciones enteras y el compañero de un sin fin de historias.

No obstante, la historia llegaría a su fin, pues el 10 de julio de 2019, se construiría el último modelo de vehículo Volkswagen Escarabajo, en Puebla. Si bien este modelo reciente era completamente diferente al original, sí tomó inspiración, al menos en su aspecto, empleando muchos elementos de diseño y tecnología actual.

Actualmente, aún se puede ver al original y peculiar auto recorrer las calles mexicanas. El ‘Vocho’ no pasa de moda, su popularidad lo ha mantenido como el preferido de muchos a pesar del paso de los años. Recuerdos familiares retornan inmediatamente que lo vemos en acción, ya que, sin duda, el auto de origen alemán tuvo como segunda patria a México.