Luz H. / Grupo Marmor
El centro de Morelia se ha convertido en un punto crítico para la proliferación de gatos ferales, según la activista Minerva Bautista Gómez. A pesar de los esfuerzos de las autoridades locales y la comunidad para abordar esta situación, el problema persiste sin una solución clara. Se estima que la ciudad alberga alrededor de 150 mil perros callejeros, pero no se dispone de datos precisos sobre la población de gatos ferales, que se reproducen rápidamente en camadas de hasta nueve crías.
La regidora del PRD ha identificado al menos seis áreas problemáticas en el centro de la ciudad, donde se han observado grupos de más de 50 gatos en cada ubicación. Entre estos lugares se encuentran el Colegio Salesiano, la calle Justo Mendoza cerca del bosque Cuauhtémoc, y varias casas abandonadas. A pesar de la falta de un conteo exacto, la situación ha llevado a una colaboración con el Centro de Atención Animal (CAA) para implementar trampas y realizar esterilizaciones con el fin de controlar la población.
Para combatir este problema, se ha solicitado la colaboración de los ciudadanos en la colocación de trampas y en el transporte de los gatos al CAA para su esterilización. Dado que los gatos ferales no son aptos para la adopción, es esencial detener su reproducción para evitar un aumento descontrolado en su número. A pesar de las esterilizaciones masivas realizadas, el problema persiste, y la falta de una investigación adecuada sobre incidentes recientes, como la muerte de gatos en la Facultad de Derecho de la Universidad Michoacana, agrava aún más la situación.