Redacción // Grupo Marmor
El nacimiento navideño es una de las representaciones más significativas de la Navidad, especialmente en las tradiciones cristianas.
Este pesebre, que recrea el momento del nacimiento de Jesús en Belén, tiene un profundo significado religioso, espiritual y cultural.
En el centro del nacimiento se encuentra el niño Jesús, quien simboliza la llegada del Salvador al mundo. Su nacimiento, en un humilde pesebre, nos recuerda la humildad con la que vino al mundo.
A su lado, se representan figuras como María, su madre, José, su padre terrenal, y los pastores que fueron los primeros en conocer la buena noticia. También se incluyen a los Reyes Magos, quienes trajeron regalos, y ángeles, que anunciaron la llegada de Jesús al mundo.
Las luces que adornan los nacimientos tienen un simbolismo especial, representan a Jesús como la luz del mundo, que llega para iluminar la oscuridad del pecado y traer redención a la humanidad.
Esta tradición cristiana invita a celebrar la Navidad como un tiempo de reflexión, amor y unión familiar.