#Video // Miércoles de Ceniza 2025 da inicio a la Cuaresma ¿Qué significa recibirla y qué si no? #México

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Redacción / Grupo Marmor

Este 5 de marzo, millones de católicos en México y el mundo conmemoran el Miércoles de Ceniza, una fecha que marca el inicio de la Cuaresma, un período de 40 días de reflexión, penitencia y conversión que prepara a los fieles para la celebración de la Pascua.

La jornada, capturada en imágenes como las del fotógrafo Jorge Alvarado para El Universal, reúne a personas en iglesias donde se impone la ceniza en la frente, un gesto cargado de simbolismo espiritual.

Según el semanario Desde la Fe, en los primeros siglos del cristianismo, el Miércoles de Ceniza era el día en que los pecadores públicos iniciaban su proceso penitencial.

Recibían un traje de sayal áspero y se les esparcía ceniza sobre la cabeza como signo de humildad ante Dios y arrepentimiento por sus faltas, una práctica que evolucionó hasta convertirse en la tradición actual.

¿Qué pasa si no recibo la ceniza? Una duda frecuente entre los católicos es qué implica no participar en este rito. El padre Salvador Barba, ex encargado de la Pastoral Litúrgica de la Arquidiócesis de México, explicó que la imposición de la ceniza es un sacramental, es decir, un signo no obligatorio que ayuda a preparar el corazón para los sacramentos esenciales de la fe. “Es como una prueba de lo que se ofrecerá en un banquete. Si no puedes tomarla, lo importante es participar plenamente en el banquete, que en este caso es la Pascua”, afirmó. El sacerdote subrayó que la ceniza simboliza un compromiso interno de conversión, pero carece de sentido si no va acompañada de un esfuerzo por corregir actitudes, superar limitaciones y acercarse a los demás. “Si alguien no puede recibir la ceniza por alguna circunstancia, no debe preocuparse, porque no es un requisito indispensable. Lo fundamental es vivir el camino de preparación hacia la Semana Santa y la Pascua con autenticidad”, añadió.

La Cuaresma invita a los creyentes a dedicar estos 40 días a la oración, el ayuno y la caridad, recordando los 40 días que Jesús pasó en el desierto.

La ceniza, elaborada tradicionalmente a partir de las palmas bendecidas del Domingo de Ramos del año anterior, es un recordatorio de la fragilidad humana y la necesidad de volver a Dios. Así, este Miércoles de Ceniza 2025 no solo marca el comienzo de un tiempo litúrgico clave, sino que también ofrece una oportunidad para reflexionar sobre lo esencial: el cambio interior y la disposición para vivir plenamente la fe, con o sin el signo externo de la ceniza.