Eduardo Ávila/Grupo Marmor
Como ya es tradición durante el Viernes Santo, alrededor de las colonias de Morelia se desarrollan diversas escenificaciones para conmemorar un año más la pasión y muerte de Jesucristo, el hijo de Dios.
Es de esta forma como decenas de creyentes se congregan alrededor de los atrios de los templos para contemplar los pasajes que narran los juicios de Jesús y su sentencia, tal es el caso de la colonia Jaujilla, en dónde alrededor del medio día inició la representación mencionada para dar paso al Viacrucis por calles aledañas.
Antes de iniciar el recorrido el Sacerdote Carlos Ernesto
conminó a la feligresía asistente a reflexionar con empatía el camino que se hizo acompañar de algunas oraciones y cantos típicos de este día.


“Perdón oh Dios mío, perdón e indulgencia, perdón y clemencia, perdón y piedad” versaba uno de los cánticos con los que la feligresía demostraba su fé.
Fue alrededor de las 3 de la tarde cuando esta procesión culminó con la crucifixión donde los asistentes enmudecieron ante la escena que recordaba la muerte de nuestro señor.
Al culminar toda esta puesta en escena la feligresía coincidió que este tipo de actividades son “un recordatorio de cuanto amó Dios al mundo” pues dispuso a su único hijo para redimir a la humanidad, asimismo mencionaron sentir de alguna forma el dolor de una madre al perder a su hijo, refiriendo no hay dolor más grande en la vida de un ser humano que perder a un ser querido.