Ulises Diaz || Grupo Marmor
India lanzó hoy una serie de ataques con misiles contra objetivos en Pakistán y la Cachemira administrada por Islamabad, en represalia por el atentado del 22 de abril en Pahalgam, donde murieron 28 personas, en su mayoría turistas hindúes. La operación, denominada “Sindoor”, fue dirigida contra presuntas bases de los grupos extremistas Jaish-e-Mohammed y Lashkar-e-Taiba.
Los misiles impactaron zonas en Muzaffarabad, Kotli y Bahawalpur. Según el gobierno indio, se trató de una acción puntual contra infraestructura terrorista, sin atacar instalaciones militares ni civiles. Sin embargo, Pakistán calificó los ataques como una violación de su soberanía y afirmó haber derribado un avión y un dron indios. También reportó ocho muertos y 33 heridos, además de daños en dos mezquitas.
La comunidad internacional expresó preocupación por la escalada. La ONU instó a ambos países a actuar con moderación, mientras que Estados Unidos pidió evitar un conflicto abierto.
Como medida preventiva, India iniciará mañana la “Operación Abhyaas”, un simulacro nacional de defensa civil ante posibles represalias.
La situación en la región es tensa, y los llamados a la diplomacia crecen para evitar una confrontación mayor entre las dos potencias nucleares.
