Redacción | Grupo Marmor
Una modificación automotriz está causando furor en Taiwán por llevar el diseño extremo a otro nivel. Se trata de un Honda Civic tan bajo que parece flotar pegado al asfalto, y ha sido apodado por internet como “Banana Peel” (Cáscara de Plátano) por su forma alargada y su apariencia casi irreal.
Este vehículo no solo ha captado miradas por su estética radical: su cercanía al suelo lo convierte en una proeza del tuning que desafía tanto las leyes de tránsito como las de la física. En redes sociales, internautas lo han bautizado como el auto más bajo jamás visto en la isla, y su imagen se ha convertido en símbolo de innovación urbana y creatividad sin límites.
Aunque se desconoce si este modelo puede circular de forma legal en vías públicas, su popularidad no deja de crecer y ya es tema recurrente en foros de diseño, ingeniería automotriz y cultura del motor.