Redacción | Grupo Marmor
Los habitantes de Gordon’s Bay, un suburbio costero cerca de Ciudad del Cabo, vivieron una escena tan insólita como entrañable: un elefante marino de más de dos toneladas recorrió sus calles este martes, desorientado y visiblemente agotado.
El enorme mamífero marino, un macho joven, se alejó de su hábitat natural y terminó avanzando torpemente entre casas, autos y aceras, hasta detenerse junto a un centro comercial. La escena, grabada por numerosos vecinos sorprendidos, provocó tanto asombro como preocupación.
La policía local y personal de seguridad intentaron contener al animal hasta que especialistas en fauna marina llegaron al lugar. Veterinarios sedaron al elefante marino y lo trasladaron en un remolque especial de regreso a la playa. La SPCA de Cabo de Buena Esperanza compartió el emotivo momento en que el animal finalmente vuelve al océano.
El caso ha generado preguntas sobre por qué el elefante marino se desvió tanto de su ruta natural, mientras especialistas advierten sobre los riesgos de estos desvíos para su salud y supervivencia.