Redacción | Grupo Marmor
Un reciente suceso ha conmocionado a la comunidad gamer: un influencer japonés se ha colocado en el ojo del huracán tras difundir un video en el que deliberadamente destruye una Nintendo Switch 2. Esta consola de próxima generación, aún no lanzada oficialmente y muy esperada por los fans, fue sometida a golpes de martillo, caídas desde alturas considerables e incluso rociada con gasolina por el usuario, quien sugería la posibilidad de incinerarla.
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— Grupo Marmor (@Marmor_Noticias) June 6, 2025
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La grabación, que rápidamente se viralizó, no solo desató una oleada de críticas en redes sociales, sino que también provocó una contundente respuesta por parte de Nintendo. La compañía no tardó en suspender la cuenta del influencer en su tienda digital, la eShop, impidiéndole acceder a juegos y servicios en línea.
Este incidente ocurrió poco después de que el creador de contenido adquiriera una unidad de la consola. Aunque su aparente objetivo era generar controversia y atraer visualizaciones, la acción fue ampliamente repudiada como un desperdicio por gran parte de la comunidad. Plataformas como X y YouTube se inundaron de comentarios condenando el acto, si bien algunos defendieron el derecho del influencer a hacer lo que quisiera con su propiedad.
La rápida reacción de Nintendo subraya su estricta política ante comportamientos que puedan dañar su imagen o su comunidad. Casos previos de consolas modificadas ya habían resultado en baneos, pero la resonancia mediática de este suceso y la inmediatez de la respuesta empresarial lo hacen destacar. La polémica ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de los influencers y el respeto hacia los seguidores, con opiniones divididas entre quienes lo ven como una estrategia de marketing y quienes claman por medidas más severas. Mientras tanto, la Nintendo Switch 2, incluso antes de su lanzamiento, sigue acaparando titulares, y este escándalo solo aviva la expectativa en torno a su llegada.