Redacción | Grupo Marmor
El Senado de la República ha dado un paso decisivo hacia la modernización gubernamental al aprobar la Ley Nacional para Eliminar Trámites Burocráticos. Con 63 votos a favor y 36 en contra, la iniciativa impulsada por legisladores de Morena busca transformar la interacción ciudadana con las instituciones públicas mediante la implementación obligatoria de la CURP biométrica y la plataforma digital Llave Mx.
Esta legislación, vista por sus defensores como una herramienta clave para combatir la corrupción y agilizar los servicios públicos, establece que la Llave Mx, vinculada a la nueva CURP, permitirá realizar trámites ante los tres niveles de gobierno e incluso organismos autónomos, marcando el fin de la tramitología tradicional.
¿Qué Implica la CURP Biométrico?
La CURP biométrica es una actualización esencial de la Clave Única de Registro de Población. Esta versión digital incluirá datos biométricos como huellas dactilares, fotografía facial, escaneo del iris y firma digital, consolidándose como un documento de identificación obligatorio y universalmente válido. Más allá de los trámites administrativos, el gobierno planea integrarla al Sistema Nacional de Salud y otros registros oficiales para mejorar la identificación de personas, incluso en casos de desapariciones, y optimizar el acceso a servicios.
Aunque la ley mandata que las instituciones adopten la Llave Mx, aún no se han especificado las consecuencias para aquellos ciudadanos que no tramiten esta nueva identificación digital.
Entre la Eficiencia y la Privacidad
La aprobación de esta ley ha generado un debate significativo. Mientras Morena celebra la iniciativa como un avance hacia la eficiencia gubernamental, la oposición ha expresado fuertes preocupaciones sobre la privacidad y el resguardo de los datos personales. Senadores como Carolina Viggiano del PRI han advertido sobre un posible riesgo de vigilancia indebida y la excesiva concentración de información ciudadana en manos del gobierno. Legisladores del PAN, por su parte, han señalado la ausencia de control judicial o supervisión independiente en el uso de los datos biométricos, cuestionando las garantías de su protección.
El Desafío de la Brecha Digital
Uno de los mayores obstáculos para la implementación efectiva de esta identidad digital obligatoria es la brecha tecnológica en México. Se estima que cerca del 25% de la población carece de acceso a internet o de las habilidades digitales básicas, lo que podría limitar severamente su capacidad para adaptarse a este nuevo modelo de trámites en línea. Este desafío subraya la necesidad de estrategias inclusivas para asegurar que ningún ciudadano quede rezagado en esta transformación digital.