Un impresionante accidente ocurrió en Alemania cuando un auto familiar perdió el control tras chocar con un vehículo estacionado. El hecho dejó como saldo varios heridos, entre ellos un niño de 7 años con lesiones graves.
El vehículo, donde viajaban un hombre de 42 años, su esposa y varios niños, se desvió del camino, atravesó arbustos y un jardín con juegos infantiles. Debido a un desnivel en el terreno, el auto fue lanzado por el aire y terminó incrustado en el techo de un granero a tres metros de altura.
Antes del impacto final, el vehículo golpeó una resbaladilla donde jugaba el menor, quien resultó gravemente herido junto a una mujer adulta. Afortunadamente, no se reportaron víctimas fatales.
Las autoridades investigan las causas del siniestro accidente, que conmocionó a la comunidad local.