Redacción | Grupo Marmor
La vigilancia en los centros penitenciarios de la Ciudad de México frustró un intento de introducir sustancias ilícitas al Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, ubicado en Santa Martha Acatitla. Mayra “N”, de 31 años, fue detenida el pasado martes al ser descubierta con aproximadamente 400 gramos de marihuana ocultos en su cuerpo.
Custodias de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) detectaron a la mujer, quien mostraba una actitud inusual y nerviosismo evidente durante el filtro de revisión para visitantes. Siguiendo los protocolos, se realizó una inspección en un cubículo privado, revelando un paquete envuelto en plástico y cinta canela, oculto en su cavidad vaginal.
La droga, con características de marihuana, fue asegurada por las autoridades como evidencia. El periodista Carlos Jiménez compartió imágenes de la detención y del paquete de la sustancia sobre una báscula, detallando la forma en que Mayra “N” intentó evadir los controles de seguridad.
Este tipo de delito, introducir narcóticos a un reclusorio, es considerado grave y acarrea penas de 10 a 25 años de prisión en la Ciudad de México, con un incremento adicional por cometerse dentro de un centro penitenciario. La detenida enfrenta actualmente prisión preventiva mientras se define su situación legal.