Redacción/Grupo Marmor
París, 6 de octubre de 2025.– El primer ministro de Francia, Sébastien Lecornu, presentó este lunes su renuncia al presidente Emmanuel Macron, menos de un mes después de haber asumido el cargo y un día después de dar a conocer la nueva composición de su gabinete, decisión que generó fuertes críticas de la oposición y parte de la derecha.
“El señor Sébastien Lecornu presentó la renuncia de su Gobierno al presidente de la República, quien la aceptó”, informó el Palacio del Elíseo en un breve comunicado, emitido tras una reunión temprana entre ambos mandatarios.
En una declaración pública desde Matignon, sede del gobierno francés, Lecornu reconoció que “no se puede ser primer ministro cuando no existen las condiciones para gobernar”, y lamentó los “apetitos partidistas” que precipitaron su salida. También hizo un llamado a “borrar ciertos egos” y priorizar el interés nacional.
El ahora ex primer ministro explicó que su objetivo había sido “construir una vía” para desbloquear temas sensibles, como el seguro de desempleo y la Seguridad Social, con el propósito de “reinstaurar una gestión compartida” con los interlocutores sociales y definir “una hoja de ruta” para sacar al país de la crisis política.
Lecornu expuso tres motivos principales para su renuncia. En primer lugar, criticó que los partidos políticos “fingen ignorar el cambio que supone no aplicar el Artículo 49.3 de la Constitución” —mecanismo que permite aprobar leyes sin voto parlamentario— y actúan “como si cada uno tuviera mayoría absoluta” en la Asamblea Nacional.
En segundo término, señaló que “los acuerdos no son compromisos” y que para gobernar se requiere “un cambio de mentalidad” y disposición a ceder, sin pretender imponer “la totalidad del programa” de cada fuerza política. Finalmente, admitió que la conformación del gabinete “no fue fluida” dentro del núcleo común de partidos de centro y derecha que integran el Ejecutivo.
El domingo, Lecornu había defendido la composición de su gabinete, afirmando que “reúne y refleja la base común que nos sostiene en el Parlamento”. Sin embargo, la nueva alineación ministerial fue recibida con críticas por parte de la oposición y de miembros de Los Republicanos, quienes denunciaron un marcado continuismo respecto al gobierno anterior.
“El reto inmediato del nuevo gabinete será dotar al país de un presupuesto antes del 31 de diciembre y servir a Francia”, había subrayado Lecornu en su último mensaje oficial, antes de que la crisis política terminara por derrumbar su corto mandato.