El viaje de vacaciones de Mariana Echeverría y Óscar Jiménez en Canadá terminó volviéndose viral luego de que la policía local los detuviera por una infracción de tránsito mientras viajaban junto a su hijo. La también conductora relató en redes sociales el momento en que los oficiales detuvieron el vehículo que manejaba el exportero del América, hecho que incluso provocó una breve discusión entre la pareja en Instagram.
La actriz explicó que la detención ocurrió porque el futbolista no realizó el alto correspondiente antes de girar: “Óscar debía dar vuelta a la derecha, pero siguió avanzando sin detenerse por completo”. Aunque Jiménez reconoció la falta, trató de justificarla con humor diciendo: “No me paré en seco, pero di la vuelta despacito. Como en México”.
La sanción impuesta por la policía canadiense fue clara: 243 dólares canadienses, equivalentes a 3 mil 182 pesos mexicanos, monto que la propia comediante consideró exagerado. Para ella, la infracción no representaba gran cosa: “No es que nos hayamos pasado un alto o estemos mal estacionados. Fue una tontería realmente”.
El desacuerdo entre ambos siguió en redes cuando Mariana comentó que no “pasa nada” si su esposo decidía no pagar, mientras que Jiménez insistía en que debía liquidarse la multa de inmediato. “No, sí se tiene que pagar. Sí se tiene que pagar”, reiteró preocupado por posibles consecuencias migratorias. Más tarde añadió: “Yo no quiero entrar un día a Canadá y que me metan al cuartito o algo”.
Entre risas, Mariana contó que incluso consultó a una inteligencia artificial sobre el tema: aseguró que ChatGPT le dijo que no habría problema si la multa quedaba sin pagar. Finalmente, ambos aclararon en una historia posterior que decidieron liquidarla para evitar complicaciones futuras.
No es la primera vez que la pareja vive un episodio similar en el extranjero. En 2022, durante un viaje a Marruecos, la policía local los detuvo por exceder el límite de velocidad. Mariana lo narró con humor en ese entonces: “Nos paró la policía por ir a 80 km por hora en carretera”. Incluso bromeó sobre si había dado soborno, aunque más tarde puntualizó: “Un musulmán jamás daría una mordida, siempre tratan de hacer las cosas correctamente”. Aquella multa fue de 300 dirhams, alrededor de 600 pesos mexicanos, muy por debajo de lo que pagaron esta vez en Canadá.
