Murió Genoveva Sánchez Peralta, madre de Israel Caballero Sánchez, uno de los estudiantes desaparecidos la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala, después de años de búsqueda incansable que no rindió frutos.
Con su deceso, ya son siete los padres y madres de los 43 normalistas que han fallecido sin conocer la verdad sobre el destino de sus hijos.
Durante más de una década, doña Genoveva participó en marchas, manifestaciones y movilizaciones junto con otras familiares, exigiendo justicia, verdad y la aparición con vida de los jóvenes desaparecidos.
Organizaciones de derechos humanos, colectivos de búsqueda y activistas han expresado su solidaridad con la familia, y lamentaron que una de las voces más persistentes de la lucha se apague sin lograr respuestas.
Su cuerpo fue velado en su domicilio en Atliaca, municipio de Tixtla, Guerrero, y este viernes será sepultada en el panteón municipal.
Este nuevo fallecimiento revive el dolor de las familias de Ayotzinapa y pone en evidencia la carga emocional, física y espiritual que ha representado una búsqueda que ya supera los once años. Muchos lamentan que mientras persiste la impunidad, las generaciones que esperan justicia también se van.


















