Eminem rompió las reglas de la NFL y se arrodilló durante su actuación en el show de medio tiempo del Súper Bowl.
El rapero inició su actuación Lose Yourself, éxito de 2002.
Eminem se arrodilló para recordar y rendir un homenaje al exjugador de los 49ers, Colin Kaepernick, quien fue vetado de la NFL por sus recurrentes protestas contra el racismo.
Una de sus propuestas más significativas fue cuando antes de un partido se arrodilló cuando entonaban el himno nacional.
El orgullo del rap en el corazón del Super Bowl. Esa fue la apuesta de Dr. Dre y Snoop Dogg para su show de la final de la NFL, en el que tuvieron como invitados a estrellas del hip-hop como Kendrick Lamar, Mary J. Blige, Eminem y la aparición sorpresa de 50 Cent.
El rap había tenido apariciones puntuales en el Super Bowl con mayor o menor protagonismo.
Pero esta fue la primera vez en la que el rap dominó de principio a fin este espectáculo musical del intermedio del Super Bowl, que se ha convertido en un acontecimiento mundial en sí mismo más allá del partido.
La elección del rap, una de las grandes expresiones culturales de la población negra en EE.UU, ya había resultado muy significativa de antemano puesto que la NFL ha afrontado acusaciones de racismo muy graves en los últimos años con casos tan mediáticos como los de Colin Kaepernick o Brian Flores.
De ahí que hubiera mucha expectación por ver cómo aterrizaba el rap en el Super Bowl con dos leyendas del rap de la costa oeste: Dr. Dre y Snoop Dog.
DE COMPTON AL CIELO
Con el suelo convertido en el mapa su natal Compton (una emblemática ciudad para el rap del condado de Los Ángeles), Dr. Dre dio el pistoletazo de salida al concierto con el clásico “The Next Episode” junto a Snoop Dogg.
Más sobrio y menos espectacular que en otras ocasiones, el escenario de este Super Bowl recreaba una calle con diferentes tiendas y locales, cada uno con una escena individual como si se tratara de las viñetas de un cómic.
“¡Costa oeste, haced ruido!”, gritó Snoop Dogg cantando desde la azotea junto a Dr. Dre.
Juntos también abordaron “California Love”, himno de Tupac Shakur, antes de que apareciera boca abajo y de la nada la gran sorpresa de la noche: 50 Cent.
Con una puesta en escena centrada en los rojos y negros y un mayor protagonismo de la coreografía, 50 Cent cantó “In da Club” antes de cederle el testigo a Mary J. Blige.
La artista, que fue la única presencia femenina del show, cambió la estética del concierto con un vestuario de color plateado y remates brillantes para cantar “Family Affair” y “No More Drama”.
Aunque de diferentes generaciones, Kendrick Lamar también es un hijo muy orgulloso de Compton como Dr. Dre.
Con una ropa en la que se leía “Dre Day”, Kendrick Lamar ofreció tal vez el segmento más cuidadp e impactante del espectáculo con una interpretación de “Alright” impulsada por una fabulosa coreografía de estilo militar y muy vistosa desde la una cámara cenital.