El Día de las Microempresas y las Pequeñas y Medianas Empresas se celebra el 27 de junio con el objetivo de reconocer la importancia de las pequeñas empresas en relación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la necesidad de facilitar su acceso a créditos y financiamiento.
Esta iniciativa fue presentada por Argentina y contó con el respaldo de 54 estados miembros, siendo aprobada por aclamación el 6 de abril de 2017 en la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En términos de definición, una microempresa se caracteriza por tener menos de diez trabajadores asalariados y un volumen de negocios anual o balance general inferior a 2 millones de euros. Por su parte, una pequeña empresa se define como aquella que cuenta con menos de cincuenta trabajadores asalariados y un volumen de negocios anual o balance general inferior a 10 millones de euros. Finalmente, una mediana empresa se refiere a aquella que tiene menos de 250 trabajadores asalariados y un volumen de negocios anual inferior a 50 millones de euros o un balance general inferior a 43 millones de euros.
Las microempresas y las pequeñas y medianas empresas (PYMES) desempeñan un papel fundamental en la economía global. Según el Consejo Internacional para la Pequeña Empresa, representan más del 90% del total de empresas, generan entre el 60% y el 70% del empleo y contribuyen al 50% del Producto Interno Bruto (PIB) a nivel mundial. Estos datos resaltan la importancia de las PYMES en la reducción de la pobreza y el impulso al desarrollo en todo el mundo.
Las PYMES suelen ser empleadoras de sectores vulnerables de la sociedad, como mujeres, jóvenes y personas desfavorecidas. En áreas rurales, a menudo son la única fuente de empleo disponible. Además, gracias a su capacidad para fomentar la creatividad, la innovación y el trabajo decente para todos, las PYMES contribuyen a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Sin embargo, las PYMES también enfrentan dificultades significativas. La falta de financiamiento es uno de los problemas más comunes a los que se enfrentan, debido a su tamaño reducido. Además, suelen tener mayores dificultades para identificar oportunidades internacionales y gestionar aspectos comerciales en comparación con empresas de mayor envergadura.
Para abordar estos desafíos, el Centro de Comercio Internacional, una entidad de las Naciones Unidas, trabaja en la internacionalización de las microempresas y PYMES. El centro ha publicado un informe titulado “Perspectivas de la Competitividad de las PYMES 2019: Dinero a lo grande para pequeñas empresas”, que aborda la importancia de apoyar el crecimiento y desarrollo de estas empresas.