Daniel Noboa, un empresario de 35 años de edad perteneciente a una próspera familia dedicada a la exportación de frutas, se ha asegurado la presidencia de Ecuador tras ganar las elecciones del domingo 15 de octubre. Su campaña se centró en la promesa de restablecer la estabilidad en un país afectado por la violencia.
Noboa, preferido por inversores y líderes empresariales, superó a su contrincante socialista, Luisa González, con un 52.3% de los votos frente al 47.7%, según cifras preliminares de la autoridad electoral, con el 90% de los votos escrutados. Luisa González reconoció su derrota, allanando el camino para la victoria de Noboa.
A pesar de su falta de experiencia política, Noboa tendrá un plazo de un año y medio para abordar los desafíos de un Ecuador afectado por poderosos carteles de cocaína, dificultades para afrontar su deuda y problemas en el Congreso que han obstaculizado la aprobación de leyes y el aumento de impuestos. Su mandato interino se extenderá desde diciembre hasta 2025.
Noboa, quien fue educado en Estados Unidos, se convierte en uno de los líderes más jóvenes a nivel mundial y tiene la intención de fomentar la inversión extranjera y estimular la creación de empleo mediante incentivos fiscales, con el objetivo de abrir aún más las puertas de Ecuador a inversionistas extranjeros.