Mafer Arévalo/ Grupo Marmor
Japón se encuentra en alerta máxima debido a un posible “megaterremoto” anunciado por las autoridades meteorológicas. El primer ministro, Fumio Kishida, canceló su viaje a Asia Central para manejar la crisis, tras el aviso de que existe una alta probabilidad de un gran sismo, el primero de esta magnitud que se ha previsto para la región. Esta situación ha generado gran preocupación entre los residentes y migrantes, ante la situación se ha recordado el devastador terremoto de 2011 que causó más de 20,000 muertes.
El pasado 8 de agosto, un terremoto de magnitud 7.1 afectó Kyushu, generando una alerta de tsunami. Aunque el evento no causó víctimas ni daños graves, la Agencia Japonesa de Meteorología advirtió sobre la posibilidad de olas menores y destacó la importancia de seguir las instrucciones de seguridad para evitar acercarse a las costas. La alerta de tsunami se levantó después de que no se registraron olas peligrosas.
El primer aviso histórico sobre un megaterremoto fue emitido tras el sismo en Kyushu, provocando una reunión de emergencia para evaluar el riesgo de un terremoto mayor relacionado con la fosa submarina de Nankai. Los científicos han instado a la población a prepararse, y la Agencia Meteorológica de Japón continúa monitoreando la situación y aconsejando precauciones adicionales.