Redacción | Grupo Marmor
El régimen liderado por Bashar al-Assad parece haber llegado a su fin tras décadas de dominio de la familia Al-Assad. Rebeldes islamistas anunciaron el domingo su ingreso a Damasco, la capital siria, marcando un punto de inflexión en el conflicto. Según el movimiento rebelde Hayat Tahrir al Sham (HTS), que había tomado previamente ciudades clave, sus fuerzas ya operan dentro de la ciudad.
Los habitantes de Damasco reportaron intensos tiroteos mientras los rebeldes llevan a cabo operaciones para localizar a al-Assad, cuyo paradero es desconocido desde el inicio de la ofensiva. De acuerdo con fuentes citadas por CNN, los insurgentes están interrogando a altos funcionarios del gobierno y militares en busca de información sobre los movimientos del exlíder sirio que sigue sin aparecer.
Los ciudadanos sirios y turcos han comenzado las celebraciones en las calles.
En la ciudad, miles de ciudadanos se reunieron en una plaza central, ondeando banderas y coreando “Libertad” en un ambiente de celebración por la salida de al-Assad. Hadi al-Bahra, líder de la principal oposición siria en el exilio, confirmó la situación, declarando que “Damasco está ahora sin Bashar al-Assad”.
Esta ofensiva representa un hito histórico en Siria, poniendo fin a 50 años de gobierno de la familia al-Assad y abriendo un capítulo incierto en el futuro del país.