El dueño de un restaurante tipo buffet llamado Changsha, en China, le negó la entrada a un cliente por comer demasiado.
El dueño asegura tener muchas pérdidas debido a la visita de este bloguero identificado como Kang.
El dueño del restaurante asegura que en su primera visita comió un kilo y medio de manitas de cerdo y en la segunda 4 kg de camarón.
Ante esto el cliente aseguró que la decisión del dueño era discriminatoria.
“Puedo comer mucho, ¿es un defecto?”