¿Qué pasa si durante la ocupación se rompe el domo de Chernobyl?

Durante las primeras horas de este jueves 24 de febrero (tiempo local), el presidente de RusiaVladimir Putin, dio la orden de iniciar con la ocupación militar en Ucrania, país con el que mantiene un conflicto desde la década pasada. Los rusos entraron por las cuatro fronteras que tiene con dicha nación ex soviética y a más de 12 horas, las tropas ya han avanzado en gran parte del territorio.

La ocupación rusa en Ucrania ha sido blanco de condenas por parte la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de países occidentales como Estados Unidos y Canadá, así como de los miembros de la Unión Europea (UE), quienes han anunciado sanciones contra Rusia y la entrega de recursos de todo tipo para la nación gobernada por Volodimir Zelenski.

De acuerdo con agencias internacionales, hasta el momento suman una veintena de personas muertas por los ataques que ya son tanto aéreos como terrestres, e incluso se habla de que los militares rusos ya tomaron el control de la zona de exclusión de Chernobyl, la planta que está cercada y que contiene restos de materal radiactivo, la cual causó un desastre nuclear en 1986.

Después de una feroz batalla, perdimos el control del sitio de Chernobyl“, dijo este jueves el asesor presidencial ucraniano, Mykhaylo Podolyak, quien también admitió que no le es posible confirmar si dicho lugar, que tiene un cerco de 30 kilómetros, aún es seguro.

¿Qué pasa si durante la ocupación se rompe el domo?

Si la naturaleza misma del domo y la radiación que está en la planta nuclear, han sido factores para que el mismo se degrade poco a poco y deje la posibilidad de filtraciones que lleguen a donde está el material radiactivo, ahora en plena ocupación militar, el peligro aumenta más en la zona de exclusión de Chernobyl.

El hecho de que los tanques militares rusos ya estén en dicha área responde a una cuestión de estrategia, ya que a pesar de que la zona de exclusión comprende unos 30 kilómetros, en realidad Chernobyl es quizá la ruta más corta y directa para llegar a Kiev, la capital ucraniana, uno de los principales objetivos de Rusia, explicó hace unos días a The New York Times, Yuri Shakhraichuk, del servicio de guardia de fronteras de Ucrania.

Chernobyl es prácticamente una ciudad fantasma, pues aunque poco a poco la gente ha regresado a vivir a la región, muchos aún tienen miedo debido a que todavía registra niveles de radiación. Es probable que no haya bombardeos en esa parte y solo sea región de paso de las tropas ahora que Ucrania reconoció que perdió el control de la zona de exclusión.

Sin embargo, en caso de que se desaten los enfrentamientos armados que alcancen el gran sarcófago y éste se rompa, se podría generar un nuevo desastre nuclear, aunque no de magnitudes tan grandes como el de 1986, ya que para que fuera similar se necesitaria tener uranio puro, mucha agua y que la planta estuviera activa; afortunadamente, en Chernobyl ahora solo hay “una masa fundida de uranio con los escombros”, explicó Epifanio Cruz.

Sin embargo, actualmente en el mundo hay muchas plantas nucleares activas y la explosión de algún reactor es una posibilidad real, pese a que se tomen todas las medidas de seguridad. 

En caso de que ocurriera una, se produciría una gran nube de polvo radiactivo que cubriría gran parte de la Tierra, “esto impediría que entrara la luz del Sol y en consecuencia morirían todas las plantas. Habría radiación letal en todo el mundo, y solo sobrevivirían las personas que vivieran en refugios bajo la tierra, donde pudieran protegerse del exceso de radiación”, explicó a UNAM Global Julieta Fierro Gossman, investigadora del Instituto de Astronomía.