En el desierto de Samalayuca de Chihuahua, realizaron un enorme monumento en honor a la víbora de cascabel, ya que en dicho estado se listan las especies de víboras de cascabel del género Crotalus.
Los creadores de esta iniciativa, han nombrado la estatua como “El Guardián del Desierto”, y se trata de una enorme víbora de cascabel, animal icónico del desierto chihuahuense.
El escultor de la serpiente es Dick Rivas y consta de 6.5 metros de altura y 10 toneladas de peso, Dick mencionó que esta obra nace con una energía especial, en sincronía con la naturaleza y los espíritus de las culturas ancestrales, y su propósito es cuidar y proteger a nuestra comunidad y a la madre naturaleza.
