Fernanda Coronel/Grupo Marmor
Morelia, Mich; 19 de enero 2024.- El ‘cruising’ es un término inglés que define la actividad sexual en lugares públicos y consiste en el juego de miradas que hay entre hombres a la hora de ligar. Raúl Martínez Rojas del Colectivo Michoacán Es Diversidad nos cuenta más al respecto.
Comenta que en esta sociedad se criminalizan las sexualidades que no tienen fines repeoductivos, es por esto que entidades policiácas “cazan y extorcionan” a hombres que van por la noche en la calle caminando, haciendo ejercicio, etc. argumentando que si traen condones es para mantener algún encuentro sexual y eso para la policía es un delito, lo que ha orillado a algunas poblaciones a tener prácticas sin condón, y es algo que no se ha modificado en los bandos de cultura cívica y buen gobierno de las administraciones de Michoacán.
Por lo antes mencionado, él aconseja para todas las personas que practican ‘cruising’ es evitar que cerca haya familias, adultos mayores, niños o personas con discapacidad porque ahí sí entraría a una implicación de delito dado a las capacidades y condiciones de estas poblaciones, pero es importante destacar que es un encuentro entre pares adultos.
Normalmente esta actividad se da de noche aunque también de día, y es una técnica de ligue batante vieja ya que comenta que antes de que hubiera mensajes o correo electrónico, salían a la plaza pública, se sentaban en una banca “a ver qué pasaba” y el que sonreía era la persona a la que le buscaban el “hola” haciendo ‘clichs’ o ‘match’ como se dice ahora.
Es importante abordar el ‘cruising’ desde la privación de espacios seguros regulados por la autoridad para encuentros entre hombres, ya que a comparación de las personas heterosexuales que cuentan con espacios en la periferia como “las cariñosas”, donde las mujeres pueden practicar el ‘teibol dance’ y los hombres pueden pagar por privados, las prácticas de hombre con hombre aún siguen siendo criminalizadas.
Propone tomar el tema de ‘cruising’ no como una persecución hacia quien lo realiza sino más como un área de oportunidad para prevenir infecciones de transmisión sexual y llegar a poblaciones clave para dar información sobre sus derechos, y no para generar un morbo preguntando ¿dónde se hace cruising?
Respondiendo lo anterior, Raúl comparte que en todos los espacios públicos se hace ese juego de miradas donde se invita al otro con lenguaje corporal a seguirle al baño, por dar un ejemplo.
“El cruising no es más que una estrategia para conocernos y reconocer nuestra sexualidad” -Raúl Martínez Rojas de Michoacán Es Diversidad.
